Monitor de Video

Quiero hacer una reseña acerca de este monitor de Video. Decidimos ….

 

¿Por qué este blog?

(este articulo lo habia escrito hace un año, y por varias razones no habia lanzado el blog, pero ahora que lo hize decidi mantenerlo ya que tiene varias cosas buenas 🙂

Tengo varias razones por la cual decidí empezar un blog.

1. Poder compartir con otras mujeres las cosas que estoy aprendiendo en cuanto al rol de esposa y madre y así animar a otras en la temporada en la que se encuentran.
2. Rendir cuentas.

Como toda chica yo anhelaba casarme y comenzar una familia, pero yo planificaba todo y me imaginaba todo de manera técnica, pero sabía muy poco de la práctica. Aun mientras escribo esto, recuerdo una clase que tomé en universidad relacionada con la familia donde saqué 4.00 y recuerdo una madre muy querida que me dijo algo así como: «en la teoría tienes perfecto ahora veremos en la práctica.» Y yo pensé: «Eso no será muy difícil.» …. ERROR! Cuan equivocada estaba.

Y en estos casi cinco años de casada me he dado cuenta que estaba bien lejos del estándar que Dios tiene para nosotros como esposas en Su Palabra. Gracias a personas que he conocido y libros que he leído como «Let me be a Woman» por Elisabeth Elliot, «Pacto Matrimonial» por John Piper, «Love your Husband, love yourself» por Jennifer Flanders y «Femenine Appeal» por Caroline Mahaney entre otros pude darme cuenta que el rumbo que estaba tomando me iba a llevar al fracaso. Gracias a Dios por un esposo comprensivo, que ama al Señor y Su Palabra y que me ama a mí lo suficiente para ser paciente, tierno conmigo y liderarme tambien, a sido mucho más fácil hacer ajustes y ver una gran diferencia en mi matrimonio. Y pues a través de este blog deseo animar a otras mujeres que tal vez se sienten decepcionadas en el matrimonio, o frustradas y necesitan ayuda para encontrar el camino de vuelta a «casa.»

En cuanto a ser madre, los pasado cuatro años han sido una montaña rusa de altas y bajas, de momentos de alegria a momentos de gran enojo y frustracion. Pero gracias a Dios por Su Palabra y por hombres y mujeres que han ido antes de nosotros y han compartido su sabiduría con nosotros. Libros como «The Power of Motherhood» por Nancy Campbell,  «Shepherding a Child’s Heart» por Tedd Tripp e «If Jesus were a Parent» por Hal Perkins me han ayudado a ver mi rol como madre como algo mucho más glorioso en lugar de una carga y me han ayudado a dirigir a mis hijas de una manera que al final del día ellas amen a Jesús más.

Y como veo la necesidad crasa que hay en nuesta sociedad por matrimonios sólidos, por hijos piadosos, espero que este sea un medio para animar a otros a escoger la mejor parte y que ustedes sean un medio para rendirme cuentas a mí. Porque yo no he alcanzado estas cosas pero anhelo alcanzarlas, y el hecho de compartirlas y que ustedes las lean me ayuda a mi a mentenerme enfocada.

Así que gracias por leer este blog, oro para que sea de gran bendición para ustedes y deseo escuchar testimonios de las cosas que Dios hará en nuestras vidas.

Con mucho amor,

Aneliz

P.D. En los archivos pueden encontrar otros artículos que escribí hace un tiempo atrás que espero que sean de gran provecho para sus vidas.

Motherhood is not for wimps/La Maternidad no es para débiles

A todas las mujeres que anhelan ser animadas en su rol como madres y esposas les recomiendo esta página http://www.aboverubies.org también pueden buscarlos por facebook Above Rubies y «Like» la página. Son mujeres que aman a Dios con todo su corazón y creen en la Palabra de Dios y la viven como muy pocas mujeres ahora mismo. Aman ser esposas y madres y anhelan exhortar y animar a otras en su llamado. Es en inglés la página, pero anhelo poder traducir alguno de sus artículos como este poema que les comparto a continuación :

(para versión en español, bajen un poco 🙂
Motherhood is not for wimps
There are those who would spurn the vocation of
mothers
And say of careers, it’s inferior to others,
I’ll have to admit that it’s not easy work,
It’s relentless and from it you cannot shirk.
It takes all of your energy being a mother and wife,
Requiring daily commitment and a disciplined life,
It demands all your resources of patience and love,
Long-suffering and wisdom from the Father above.
It takes self-control and continual endurance,
It needs constant faith and great perseverance,
It means total sacrifice, forgetting your self,
Sometimes you think that you’re left on the shelf!
And what about time? It’s no longer yours,
It belongs to all those who come in your doors.
Claim your own rights? No, they’re all gone too,
Like your right to sleep the whole night through!
It’s not so easy to crawl into bed with a book
Or go off and dream in some quiet little nook.
It seems like you’re totally losing your life
To be a good mother and a submissive wife.
But oh, faithful mother, please do not despair,
In God’s perfect plan you do have a share,
To fulfil your destiny planned from creation
Which is to nurture children and BUILD A NATION!
You’re walking in the footsteps of Jesus your Lord
Who sacrificed all, His life He out-poured,
He didn’t cling to His rights with selfish futility
He didn’t claim any privilege but walked in humility.
He gave up His life to save millions of others,
This principle works in the lives of all mothers,
When you lose your own life you’ll find it again,
A rewarding life, without guilt or shame.
So lift up your head, embrace your calling so high,
You’re in God’s perfect will, there’s no reason to
sigh!
You may often feel worthless – don’t listen to this lie,
Your influence goes higher than the clouds in the
sky!
As you nurture and train your God-given seed,
As you sharpen these ‘arrows’ by word and by deed,
You shape the nation – you determine its course,
Your mothering’s not wasted, it’s a great mighty
force!
As your children leave home and go into the world
The proof of your training will soon be unfurled
You’ll influence countries where you’ve never been,
And down the generations its effect will be seen.
Your work is so powerful, no wonder it’s tough,
But God is behind you, He’s the GOD WHO IS
ENOUGH,
His strength and His wisdom He will give to you,
He stands by His promises which are totally true.
He’ll always be with you right through to the end
As you follow His leading and deny the world’s
trend,
Each morning you wake, your strength He’ll renew.
He’ll fill your home with His presence and His
blessed peace too.
by: nancy campbell
en español:
La Maternidad no es para débiles
Hay algunos que rechazarían la vocación de madres
Y dirían que de las carreras, es inferior a las demás,
Tendría que admitir que no es trabajo fácil,
Es implacable y de él no te puedes esquivar.
Toma toda tu energía el ser una madre y esposa,
Demanda todos tus recursos de paciencia y amor,
Longanimidad y sabiduría del Padre celestial.
Toma dominio propio y continua resistencia,
Necesita fe constante y gran perseverancia,
Significa total sacrificio, olvidarte de ti mismo,
A veces piensas que estas pintada en la pared!
¿Y qué del tiempo? Ya no te pertenece,
Le pertenece a aquellos que entran por tu puerta.
¿Demandar tus propios derechos? No, ya no quedan ninguno,
Como el derecho de dormir toda la noche sin parar!
Ya no es tan fácil treparte en la cama con un libro
O irte y soñar en algún rincón en silencio
Pareciera que estas perdiendo tu vida por completo
Para ser una buena madre y una esposa sumisa,
Pero oh, madre fiel, no te desesperes
En el plan perfecto de Dios sí tienes una parte,
Cumplir tu destino preparado desde la creación
El cual es nutrir a tus niños y ¡EDIFICAR UNA NACIÓN!
Estas siguiendo las pisadas de Jesús tu Señor
Quien sacrificó todo, Su vida derramó,
No se aferró a sus derechos con futilidad egoísta
Él no reclamó ningún privilegio sino que caminó en humildad.
Entregó su vida para salvar a millones de otros,
Este principio trabaja en la vida de todas las madres,
Cuando pierdes tu vida la encontrarás de nuevo,
Una vida gratificante, sin culpa y vergüenza.
Así que levanta tu cabeza, abraza tu llamado sublime,
Estás en la voluntad perfecta de Dios, ¡no hay porque suspirar!
A menudo te sentirás indigna – no escuches esta mentira,
Tu influenza sobrepasa las nubes en el cielo!
Mientras te nutres y adiestras tu simiente dada por Dios,
Mientras afilas estas ‘flechas’ por palabra y hecho,
Formas la nación –determinas su curso,
Tu maternidad no se está perdiendo, es una fuerza poderosa!
Mientras tus hijos salen de tu casa y van al mundo
La prueba de tu adiestramiento pronto será desplegada
Influenciaras países que nunca has visitado,
Y a través de las generaciones el efecto se verá.
Tu trabajo es tan poderoso, con razón es tan fuerte,
Pero Dios está detrás de ti, Él es el DIOS QUE ES SUFICIENTE
Su fuerza y Su sabiduría Él te dará,
Él es fiel a Sus promesas que son completamente verdaderas.
Siempre estará contigo hasta el fin
Mientras sigues su liderazgo y niegas las tendencias del mundo
Cada mañana despiertas, tus fuerzas el renovará.
Él llenará tu hogar con Su presencia y Su bendita paz también.
Por: Nancy Campbell

El Rey Siervo

Siguiendo la misma línea de pensamiento de mi nota anterior. Hace par de minutos le leí Anaiah antes de su siesta (como de costumbre) de la «Biblia de Jesús.» Así le llama ella a la «Biblia para niños Historias de Jesús: Cada historia susurra su nombre»

La Historia de hoy era El Rey de todos los reyes (El cuento de los tres sabios de Mateo 2) y este es el último parrafo que leí:

«Pero este niño era una nueva clase de rey. Aunque era Príncipe del cielo, se había hecho pobre. Aunque era Dios poderoso, se había convertido en un nene indefenso. este Rey no había venido para ser jefe. Había venido para ser siervo.»
Esto produjo en mí admiración, mi corazón quería reventar en alabanza y adoración por Jesús. Y oré con Anaiah: «Oh Gracias Jesús! Gracias por ser esta clase de Rey. Gracias por ser el siervo de todos. Enseñanos a servirnos los unos a los otros y ser más como tú. Ayúdannos a amar bien.» Y pensé tengo que escribir (porque así me ayuda a procesar mejor y no sólo ignorar el pensamiento, sino realmente en oración hacer de esto una realidad en mi vida) y a la vez lo comparto con otros.
En una cultura donde lo que se promueve es todo auto-satisfacción y vivir a expensas de otros. Jesús nos muestra un camino mucho más sublime, es el camino del servicio i.e. el Camino de la Cruz. Él no vino a que le sirvieran sino a servir a otros. Él no nos llamó a ser los mayores, sino a servir a los demás. Sí Él es Rey, pero el es un Rey que sirve a otros. Sí, nosotros vamos a reinar con Él, pero no es como los reinos de este mundo, su Reino no es de este mundo, es tan diferente. Nosotros reinaremos sirviendo. Ahora mismo estamos siendo preparados para reinar y por eso tenemos que desde ya, hacerlo con gozo y agradecimiento y deleite, porque por toda la eternidad lo vamos a hacer. Yo como madre estoy siendo entrenada para reinar mientras limpio los platos, lavo la ropa, cambio los pañales, sirvo la comida, etc. Mi esposo esta siendo entrenado en la medida que el pasa horas dándose al lugar de oración y la palabra y aun traduciendo y enseñando a otros, ayúdandome en los quehaceres de la casa y con las nenas, prefiriéndome a mí antes que sus propios deseos. Mis hijas están aprendiendo al compartir y ayudar y recoger y perdonar. Todos en cada caminar de nuestras vidas tiene muchas oportunidades para aprender a servir y abrazar el Camino de la Cruz, tomaremos nuestra cruz (aunque realmente ahora mismo no es tan doloroso) y lo seguiremos?
«Hoy, Señor pongo mi mirada en Tí. Tú eres el Siervo de Todos. Tú eres mi ejemplo y mi anhelo. Servir no es algo fácil para mí. Ayúdame, dame gracia para vivir digno de tí. Que hoy y siempre escoja servir, escoja morir a mis anhelos y deseos para escoger lo que es mejor: Amor. Mi Espranza está en Ese Día cuando estaré contigo y Serviré a tu lado. Te amo Señor.»

Sirviendo con gozo

Hoy desperté con este pensamiento: «Hoy quiero servir con gozo porque en ese DÍA voy a servir y será con gozo porque estaremos con Jesús el hombre más feliz que haya vivido en la tierra. Él es mi inspiración y mi motivación.»


Mientras más lo pienso más me doy cuenta de que este pensamiento no fue sólo un pensamiento…fue el Espíritu Santo hablando a mi corazón (Él definitivamente es nuestro Consolador=Ayuda).



En los pasados días he estado sufriendo en mi interior, ya que estoy tan consciente de mi debilidad, mi falta de paciencia y mi tendencia a molestarme hasta por las cosas más inánimadas (sin vida, efímeras, etc.). Melleno de auto-compasión y me siento víctima de todo y todos. Es patético lo sé, pero es con lo que he estado luchando.

Dios me ha bendecido con dos hijas hermosas, llenas de vida, que están mirando cada paso, cada gesto, escuchando cada palabra y cada tono, sintiendo cada abrazo y cada rechazo…ellas son un libro con muchas páginas en blanco esperando que se escriba en ellas memorias que durarán toda la vida. Yo no quiero
escribir en ellas quejas, enojo, impaciencia, deshonra, falta de perdón. Yo quiero que ellas vean a Cristo en mí. Ese es mi deseo y esa es mi oración. «Más de Ti, menos de mí Señor.» En mi no hay nada bueno aparte de Él.

Por eso hoy le pido gracia, gracia para amar bien a mi esposo e hijas y a los demás que me rodean. Gracia para servir en todo con gozo como Él sirvió, sirve y servirá cuando regrese a establecer Su Reino de justicia en la tierra. Mi gozo es que un día lo voy a ver y todo lo que estoy haciendo va a contar. Él ve el vaso de agua que sirvo, Él ve los pañales que cambio, Él ve las noches que no duermo atendiendo a mis hijas porque tienen fiebre o catarro. Él ve y Él no lo olvida, Él escribe todo en Su libro. Él ve las lagrimas que aún ahora mismo derramo en mi quebranto y Él dice que las guarda en su botella (Salmo 56:8).



Mi gozo no puede estar determinado por mis circumstancias sino que tiene que estar anclado con mi esperanza en que Él va a regresar y un Día TODO va a estar bien por que vamos a estar con Él.

«Padre dame gracia hoy para servir con gozo, para poner mi mirada en Ti y ser libre del egoísmo, enojo y otras cosas. Me arrepiento por mis actitudes, te pido que sanes mi corazón y el corazón de los que he herido y que Tú nos restaures con tu amor. En el nombre de Jesús, Amén.»